In memoriam Franceso
Petrarca
(20 de julio, 1304-18 julio,1374)
me has leido
de eso estoy seguro
de eso estoy
seguro
y me pregunto desde las ardientes orillas de la muerte
dudas y preguntas mías y de otros poetas
desde adentro y más allá de la muerte
dudas y preguntas en estos tiempos de guerra
más que nada
y nadie mi Petrarca muerto
con su propia Laura para lamentar
su suave sonrisa umile e piano
ella también amaba la poesía
como Laura esta otra Laura
mi amigo
Francesco conjurándome
que la contacte que le mande un mensaje
a esta Laura Laura
que use el inglés en que yo solía escribir
que use el inglés en que ahora habla su garganta de Laura
pregúntale
pregúntale
cómo se
comparten los sonidos con que baila su garganta de Laura
con el hombre que la desposó
los labios de
George en esos labios de mujer
las manos de George en las manos ardientes de su mujer
Laura Laura
te olvidaste de la poesía?
usaste
nuestras palabras para tu esposo y guerrero
palabras y versos y sonetos
que alguna vez leíste
la voz mía en el lago de tu mirada
la voz nuestra en la mirada de tu mano
he de compararte a un día de verano
cómo pueden los poemas amparar su vuelo
verde que te quiero verde
polvo serás más polvo enamorado
me gusta cuando callas pues estás como ausente
mi madre aulló de dolor y mi padre solloza
y yo salté hacia el mundo lleno de muerte
cómo pueden los poemas
ángel de luz ardiendo incendia los abismos
cómo olvidan los poemas
cuando el guerrero hace aullar a la madre sollozar al padre
tigre
tigre que ardes de luz
ardiente tigre de luz en el eufrates de la noche
tigris y eufrates ardientes de luz y fuego
el encendido fuego en que me quemo
verde viento verdes ramas
le recordaste
a tu guerrero el día de verano profanado y la novia la novia
sin su primavera mozuela
ni la dulce boca que a gustar convida
Laura Laura
le murmuraste que sí que sí
recibiste al hombre de guerra en tu cauce de mujer en tu silencio de sábanas
abriéndole algo más que tus labios
susurraste un no sé qué que quedas balbuciendo
lo comparaste a un día de verano
recogiste la breve flor que cuando nace muere
s'io credese per morte essere sacro
cómo no imprecar las mil naves
el río escarnecido
el carro funerario de la novia
la hija que ardió en los bosques
en los bosques de arena de la noche
en el fuego verde que arde de
luz en la piel de la noche
y las calles las calles venid a ver la sangre por las
desesperaste
del poder del verso?
quien hizo al Cordero te hizo a ti?
quien hizo al León me hizo a mí?
qué le murmuraste a ese
hombre
qué ciénaga de la lengua
la noche en que mandó el fuego
y la espada
ese hombre borracho de guerra
que aniquila las palabras del verano
sereno y claro
por las que reza nuestro canto
ay Laura Laura
qué nos dirás qué excusas y plegarias
el día en que llegues a esta orilla
de este otro lado de la muerte
que no tuviste tiempo ni mundo
ni palabras ni tiempo ni mundo
pedirás un soneto para Laura
pedirás unos versos para engañar a la mancillada realidad
ay Laura Laura
fue tuya la cara la boca los labios fueron
que pudieron haber detenido
las mil naves de la noche
ardiente y triste.
[Ariel Dorfman] |